México celebra el Día del Maestro el 15 de mayo. Para los niños con discapacidad visual y discapacidad múltiple, los maestros están en primera línea apoyándolos en su proceso de aprendizaje y facilitando que se conviertan en una parte activa de su comunidad. Con paciencia, amabilidad y una gran experiencia, son los maestros quienes pasan sus días con estos niños, enseñándoles y brindándoles apoyos para crecer y prosperar. En resumen, estos maestros son nuestros héroes. Para conmemorar el Día del Maestro, conversamos con Angélica Bastarrachea, maestra de grupo de la escuela de educación especial CAM Tecoh, en el estado de Yucatán, México. Perkins comenzó a trabajar con CAM Tecoh en 2019. CAM Tecoh es uno de los programas modelo de Perkins y, a través de Perkins International Academy, se brinda capacitación a su personal docente. Como parte de esta colaboración continua entre Perkins y CAM Tecoh, Angélica -o Angie, como le gusta que la llamen- actualmente está capacitándose en el campus de Perkins en Watertown como parte del Programa de Liderazgo Educativo.
Todas las mañanas, Angie sale de su casa en Mérida alrededor de las 6:00 a. m. hacia Tecoh, una comunidad rural al sur de la ciudad. Disfruta de su viaje de una hora, la ayuda a relajarse y prepararse para el día que tiene por delante. La cajuela de su coche siempre está llena de materiales nuevos para sus alumnos. Ella hace calendarios de comunicación para ellos, libros de texturas y también ayuda a adaptar sillas y soportes para la cabeza, para que los niños con discapacidad múltiple puedan obtener el apoyo que necesitan para sentarse cómodamente en el salón de clases y aprender.
Las clases comienzan a las 8:00 horas, pero los alumnos empiezan a llegar al CAM Tecoh a las 7:30 am. Antes de que lleguen sus alumnos, Angie debe verificar que el salón de clases esté limpio y seco: hay una gotera y puede ensuciarse con la lluvia.
Cuando los estudiantes llegan a la escuela, Angie habla con sus padres y revisa los registros del estudiante. Le gusta saber si cenaron la noche anterior, si durmieron bien, si tomaron medicamentos y si desayunaron. Todo esto afectará el desempeño de los estudiantes en la escuela y a Angie le gusta estar preparada para abordar las necesidades de los niños en consecuencia. El estudiante más joven de Angie tiene un año y el de mayor edad tiene 10 años.
Para Angie, una de las partes más importantes de su trabajo es la comunicación con los padres de sus alumnos. Ella cree que la familia necesita participar en la educación de sus hijos para que puedan aprender y convertirse en miembros activos de sus comunidades.
Angie les pregunta a los padres qué les gustaría hacer y qué objetivos tienen para sus hijos. Basado en eso, ella desarrolla un plan. Ella siempre pregunta a los padres cómo están, muestra empatía porque los padres y la familia son parte integral del apoyo de cada niño. Sin el apoyo de su familia, la educación de los niños se complica.
Una gran parte del papel de Angie como maestra es involucrarse con cada familia. Para ella es importante aprender todo lo que pueda sobre la rutina de cada familia, para poder estar así al mismo nivel en el proceso de aprendizaje de los niños. Angie motiva a los padres a preparar materiales para sus hijos, especialmente actividades interactivas con el niño. Por ejemplo, una madre hizo un tapete sensorial para su hija. Sentarse con los padres le da la oportunidad a Angie de aprender más sobre los padres y sus hijos. Poco a poco los niños se involucran. Al trabajar con las familias, Angie las está capacitando para que sean los mejores defensores de sus hijos.
Este Día del Maestro, queremos celebrar a Angie y a todos los maestros que ayudan a cambiar la vida de sus alumnos y crean un impacto duradero.
