Adrián García, persona con sordoceguera nos comparte una reflexión de su experiencia.
“La sordoceguera no es un impedimento, es un camino de vida. Dejamos de ver y oír, pero aprendimos a mirar y escuchar con el corazón”
Imagen: Hombre bajando sentado por las estrechas escaleras, hechas de piedra, pertenecientes a las ruinas, un hombre lo observa atrás. En la parte inferior hay un texto que dice: Ruinas de Machu Picchu